Hoy compartiré contigo 3 mitos sobre los Bienes Raíces, ya que estas falsas creencias sólo limitan los beneficios que puede llegar a ofrecer el rubro inmobiliario.
Además, no sólo tienen relación en el aspecto económico, sino que también con las posibilidades de compra y el tiempo necesario que debemos destinar a este tipo de trabajo.
Para comenzar con tu propio negocio y alcanzar la meta de ser tu propi@ jef@, hay que comenzar por dejar atrás las creencias que nos limitan a dar el gran paso y poder lograr nuestro éxito profesional y personal…¡Así estarás cada vez más cerca de alcanzar tu Paz Financiera!
Ahora sí, sin más preámbulos, te comparto estos 3 mitos sobre los Bienes Raíces.
Mito #1: “No es un negocio”
Es común creer que dedicarse a rentar o vender casas y departamentos no es un buen negocio, sin embargo, es útil considerar las utilidades que se pueden obtener a través del terreno. Y es que, como en cualquier terreno, las ganancias se reflejan al momento en donde se cierra un trato con éxito, de tal forma que, a mayor dedicación, mayores serán las posibilidades de emprender.
Si quieres conocer 3 mitos sobre la inversión en bienes raíces, te recomiendo leer la entrada de mi blog aquí.
Mito #2: «Tiempo»
Más que ser una actividad que complementa las actividades diarias, los bienes raíces deben verse como una actividad seria, en donde los agentes deben dedicar el tiempo justo para obtener buenos resultados. Como todo negocio, esta labor requiere de tiempo, planeación y ejecución de actividades para poder ver frutos en lapsos considerables.
Mito #3: «Temporada»
Existe la creencia de que verano es la mejor temporada para vender y, por lo tanto, incorporarse al terreno de los bienes raíces; sin embargo, las decisiones de cambio de casa existen a lo largo del año, donde algunos impulsores del tema son los cierres de ciclo escolar o cierres de año.
Si quieres conocer más conceptos para tener en cuenta a la hora de vender una propiedad, te recomiendo mi video «NO VENDAS TU CASA AHORA: Puede ser tu Peor Error».
Y por último, te recuerdo que: