Si elegiste continuar leyendo puede que quieras saber: cuál es este enemigo que te aleja de lograr la paz financiera con inversiones en bienes raíces y crear un futuro diferente para ti y tu familia.
Para entender por qué este enemigo es tan poderoso debemos hablar de dónde proviene. Y para eso tenemos que mencionar al fenómeno: “Desesperanza Aprendida”.
¿Quieres saber de qué se trata? Bueno te lo contaré…
Según Martin Seligman , la “Desesperanza Aprendida” es el estado en el cual la persona entra para no sufrir la decepción de no tener algo. Es un “mal” que afecta a toda persona sin importar su lugar de residencia.
Al reflexionar sobre esto me di cuenta que en los años que llevo trabajando con miles de personas de diferentes países, (por medio de mis talleres, cursos, mentorías, ya sea de forma grupal o individual) gran parte de ellos padecen de desesperanza aprendida y esa puede ser la razón por la que muchas veces no se atreven a soñar…
Pensar en todo esto me hizo recordar que cada vez que estoy con un grupo y le pido a cualquiera de las personas allí que me hable de sus sueños, sucede algo muy extraño dentro del salón.
Tal vez estás pensando ahora: ¡¿Qué tan extraño!??
MUY.
Inmediatamente, el ambiente del salón se vuelve tenso. Es como si esta pregunta fuera pesada para todos los presentes (o al menos para su gran mayoría) y de repente la energía parece cortarse.
En varias ocasiones me pregunté: ¿Por qué sucede esto? Si las personas están aquí porque quieren un futuro mejor, necesitan aprender a invertir para crear un futuro financiero más seguro y estable.
¡Hasta que lo entendí!
Me he dado cuenta de que la mayoría de personas, NO SE PERMITEN SOÑAR.
¡Y atención aquí!
No es que a las personas no les interesa soñar, porque cada vez que ven una revista, cuando ven viajes en la tv, piensan:
“Me gustaría viajar”…
“Me encantaría tener esto, aquello”…
Pero, en realidad no lo consideran su sueño (con la posibilidad de alcanzarlo u obtenerlo). En lugar de ello, lo sienten como un deseo, incluso en algunas ocasiones hasta lo ven como inalcanzable (no es algo que puedan hacer suyo, y ni siquiera lo creen posible para sí).
Una de las razones por las que yo creo que las personas no se permiten soñar, por ejemplo con la posibilidad de invertir en bienes raíces, se debe a causa del enemigo que mencioné al principio, me refiero al MIEDO A SOÑAR. Y se escudan en justificaciones como: “es algo para cierto sector social o para muy pocas personas”.
¡Nada más lejos de la realidad! Te lo voy a demostrar…
Voy a mostrarte que tú tienes todo lo necesario para deshacerte del MIEDO a soñar (tu enemigo) y lograr tu paz financiera.
Concédeme unos pocos minutos y lo verás…
Quiero que pienses en todo lo que has alcanzado en tu vida… Piensa en aquellos logros que al comienzo parecían imposibles, todo lo que en un principio eran como un sueño y tú lo hiciste realidad.
Ahora, compara esos momentos con los deseos que surgen cuando estás viendo un comercial en la televisión, cuando ves la publicidad del viaje y empiezas a pensar en dónde te gustaría estar, con quién te gustaría estar y el tipo de vida que te gustaría tener…
¿Te das cuenta de la diferencia entre las dos situaciones?
En la primera lo hiciste. Lograste hacer realidad aquello que parecía un sueño . En la segunda tu deseo vivió el tiempo que duró el comercial…
¿Qué pasó? ¿Por qué en algunas situaciones sí lo haces posible y en otras no?
Simple…
Factores que marcan la gran diferencia entre un deseo y un sueño
Existen dos factores que marcan la gran diferencia entre el deseo y tu sueño; y éstos son:
LA DETERMINACIÓN y EL COMPROMISO.
Se trata de decir:
“Voy a sacar a mis hijos adelante”
“Voy a sacar este negocio adelante”
“Voy a ahorrar para mi primer inmueble”
Y hacerlo con fuerza, compromiso y determinación tan grandes que sientas como ese deseo se convierte en tu próximo sueño a alcanzar. Verás como, poco a poco, logras conectar ese deseo, y esa fantasía, con tu vida real.
Esto es clave: Ya no puedes seguir pensando:
“¡Ay! Yo quiero unas vacaciones, pero con este sueldo nunca voy a poder pagarlas” Porque lo único que harás será matar tu sueño sin siquiera haber comenzado.
Es como el cuento del nuevo vecino. ¿Lo conoces?
Un hombre se pasa a un nuevo vecindario y mientras acomodaba sus cosas, se dio cuenta que necesitaba un martillo. Al señor se le ocurre que el vecino puede tener uno y se dirige hacia su casa. En el transcurso de su caminata empieza a pensar:
“Yo nunca he saludado al vecino”
“¿Y si el vecino tiene cara de mala gente?”
“Probablemente va a desconfiar de mi”
“Seguro me va a decir que con qué derecho voy a pedirle un favor, y me viera como un descarado”…
Mientras va caminando, alimenta este tipo de pensamientos, hasta que llega a la puerta del vecino, toca, y espera unos segundos. Luego se abre la puerta. Del otro lado hay un hombre parado con una enorme sonrisa y sin dejarlo decir nada el hombre le dice:
_ “Quédese con su maldito martillo” y ¡NI SIQUIERA LE HABÍA PREGUNTADO NADA!
Eso es lo que hacemos a diario.
«Matamos a nuestros sueños por miedo, sin ni siquiera darles la oportunidad de hacerse realidad».
Cuando yo tenía unos 16, 17 años, soñaba con viajar a otros países y que la gente me pagara por viajar y poder estar trabajando y enseñando a muchísimas personas. Mi primer viaje lo logré a mis 26 años y estaba muy lejos de alcanzar todo eso que soñaba.
Es más, si lo pienso fríamente en aquel momento era imposible hacerlo porque estudiaba derecho, no tenía ni para pagar mi comida, yo vivía en un inquilinato con muchas personas compartiendo una cama,
Y siendo completamente sincero…
Puedo describir mi situación de ese momento diciendo que un buen día para mi, era cuando podría desayunar 3 veces: café en la mañana, café al medio día y café a la comida.
Mi vida era un desastre, pero no estaba en mis planes rendirme. Y ¿sabes qué hizo la diferencia entre aquella situación y la actual? ¿Cómo logré pasar de la nada a la abundancia?
Que YO SOÑABA, yo me decía a mi mismo:
“Ya soy millonario, lo único que me falta es la plata” y me comprometí fuertemente con ese sueño. Y no dudé en que lo haría realidad.
Si estás aquí entiendo que tú también tienes tus sueños, puede que sea…
… tener tu propia casa para sentirte a salvo.
… crear un fondo de inversión que te genere tranquilidad.
… tener propiedades que te aseguren dinero.
… crecer tu capital para sentirte respaldado.
… Tener el dinero disponible para viajar
… En fin, todo aquello que sin pensarlo te hace suspirar.
Voy a ayudarte ahora mismo a que puedas conseguirlo. ¿Cómo?
Te invito a que te permitas soñar… La forma fácil de empezar a hacerlo, es ESCRIBIENDO TUS SUEÑOS.
ESCRIBE TUS SUEÑOS.
¡Hazlo!
Escribe tus sueños, suéltate escribiendo, deja que fluya sin condicionamientos ni barreras. Solo escribe…
… ¿Cómo sería mi día ideal?
… ¿Qué trabajo me gustaría tener?
… ¿Cómo te gustaría sentirte acerca de ti?
… ¿Cómo te gustaría que fuera tu relación ideal?
… ¿Cómo te gustaría sentirte acerca de ti?
Trata de que sean sueños muy concretos y que sean sueños tuyos no de las personas que te rodean. No importa que tu “loca de la casa” (así es como llamo a los pensamientos caóticos) te empiece a decir que estás muy lejos, que no vas a poder, que no es para ti…
((Y todo ese bla, bla, bla que ya conoces))
¡Solo escribe todos tus sueños!
Es imposible que logres algo si no te permites soñar. Si tú comienzas a soñar te vas a dar cuenta que vas a extender tu mente y tus sueños van a ser más grandes y ese enemigo no podrá contra él.
¿Cómo vencer al enemigo de tus sueños?
Sin dudas el miedo es muy poderoso. Éste te detiene y te impide avanzar hacia lo que quieres. Es momento de dejar de darle poder a tu miedo, éste siempre va a existir, aún cuando te encuentres en el lugar que deseas tendrás miedo de hacer cosas nuevas.
Incluso a mí me sucede, cada vez que voy a hacer algo nuevo me da miedo, (en distintos niveles y dimensiones). Y como es lógico, cuanto más sueñas y más alto, más miedo tienes, pero no debes dejar que él gane.
En mi caso personal, he logrado convertir al miedo en un recurso maravilloso que llegué a conquistar. Y cuando el miedo se presenta hago que me conecte con el aquí y ahora y lo utilizo para mirar de qué me tengo que cuidar, que puedo perder si no me atrevo a ir tras mis sueños.
Es en ese momento cuando al miedo le agrego mi DETERMINACIÓN a conseguir mi sueño. Puedes intentarlo también y verás cómo lo vas a superar. La determinación es la que te ayudará a conquistar ese miedo y a convertirlo en un recurso que te impulse a lograr todo lo que quieras.
¡Ya lo has hecho antes!
Vuelve a pensar en esos sueños que cumpliste a pesar de tus miedos…
Estarás de acuerdo conmigo en que los cumpliste porque le diste más importancia a tu determinación y compromiso de querer hacerlo. Ahora ya sabes que tienes el poder para conquistar tus miedos. No permitas que te roben tus sueños de libertad.
«Una vez domines tu miedo, veneras también a sus dos aliados»
TUS DOS ALIADOS
Aliado #1: La comodidad. También llamada zona de confort o zona segura (que de segura no tiene nada) …
El asunto es que en ocasiones las personas no quieren salir de esa falsa comodidad porque esto las obliga a ponerse incómodas. Es decir que tendrán que tendrán que cuestionarse “sus verdades” como por ejemplo:
… “Es imposible cambiar mi situación”
… “No es que yo no puedo comprar un inmueble al año”
… “No es que yo no puedo porque tengo poco dinero”
… “No esto no se puede”
Te quedas donde estás porque sino ya no podrías justificar tu situación. El desafío es salirte de esa zona. Ponerte incómodo para emprender acciones.
Buscar aquello con lo que sueñas sin excusas. Te aseguro que si te comprometes de verdad a hacerlo, experimentarás cambios en todas las áreas de tu vida.
Repítete siempre:
“No me importa lo que tenga que hacer, pero voy a tener la determinación de cumplir mi sueño, voy a salir de mi comodidad y a luchar por ese sueño».
El momento es ahora. Sal de tus verdades, sal de tu comodidad y logra lo que sueñas.
Aliado #2: “LAS VOCES”, este es un aliado del enemigo que puede ser letal a la hora de alcanzar sueños. Ellas aparecen y las escuchas cada vez que quieres hacer algo diferente.
Pero debes tener cuidado porque hay una voz que es la peor de todas y es: LA PROPIA VOZ.
Es cuando te dices a ti mismo:
… “ No puedo”
… “Yo no soy capaz”
… “Me va a ir mal”
Esos golpes son los más difíciles de soportar. Cuando alguna de estas voces resuene en tu cabeza, será mejor que te pongas un ALTO.
Y recuerdes todo aquello que sí lograste. Todo lo que ya has conseguido. La veces que saliste de tu comodidad y fuiste tras tus sueños…
Tú tienes el poder de lograrlo. Nadie más.
Y si quieres hacer inversiones en bienes raíces, adquirir una propiedad al año, tener libertad financiera, estar en un estado de seguridad y tranquilidad porque tienes ingresos pasivos solo tienes que deshacerte de la desesperanza aprendida, convertir tu deseo en tu sueño e ir por él.
Y, por último recuerda que:
“Lo único que te aleja de lograr lo que TÚ quieres es un pensamiento que no es cierto”.
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